La calidad de imagen es buena, a secas, intercala escanas muy buenas en lo referente a nitidez y color con otras quemadas, con el color trastocado o con mucha suciedad de celuloide.
El tema del audio es realmente vergonzoso: el original mono, que en el master USA era un magnífico DTS-HD es aquí un mísero Dolby Digital falseado a stereo, pero lo peor viene con el doblaje castellano, puesto que durante toda la película faltan muchísimos fragmentos de éste, que aparecen en inglés subtitulado, y que sí han podido ser disfrutados hace poco de forma íntegra, en las emisiones de este filme a través del Paramount Channel.
No lleva un mísero extra, y el menú es algo que podría hacerse con un poco de práctica con Power point o Flash.
Y para más inri, es un BD-R, edición que, por mucho que nos quieran colar, no llega a la suela del zapato a las que se hacen en disco prensado.
Sientiéndolo mucho, ahí va mi nota:
Imagen: 6
Audio V.E.: 4
Audio V.O.: 5
Extras: 0
Menús: 2
Penalización por edición BD-R: -3
Total: 0,4. Que se quedará en un 1, siendo magnánimos.
Si el audio original hubiese sido el mismo que el del master USA y el doblaje castellano, que es el original de siempre, hubiese estado íntegro, la edición sería pasable, pero en estas condiciones, y además siendo BD-R, es lamentablemente una edición que no sirve ni para calzar una silla.
Otro BR-R y encima con una calidad muy inferior al DVD que se comercializó no hace demasiado. ¿Por qué seguir dando dinero a estos chapuceros? Que se enteren de una vez: No queremos BR-R tostados del top manta, queremos BR fabricados.
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