Peter McNulty

Me entró hace unos años una fiebre por Superman de Donner, que tenía que ponerme una imagen de Reeve sí o sí. Y me gustó mucho ésta, con ese azul del cielo y esa fantástica pose de Reeve. Eso sí, Stallone es insuperable!

Gracias neored! Me parece recordar que Shane Black también hacía un pequeño cameo en Robocop 3, dirigida por su amigo Fred Dekker.

Por cierto, me encanta la foto de tu nick!!

Pedazo de artículo!! Enhorabuena. Estoy de acuerdo en todo. Además deseando ver que sale de esa vuelta a Predator. No sé si recordais que Shane Black era el que le contaba los chistes al indio en la película de McTiernan

Gracias a los dos! Ya tiene su tiempo, pero para que siguiera cogiendo polvo, me he decidido a subirlo.

Buen articulo Peter McNulty.

Muy buen articulo amigo :-).

Hace unas semanas que se estrenó en nuestro país la última película escrita y dirigida por Shane Black, ‘Dos Buenos Tipos’ (‘The Nice Guys’, 2016) y este ha sido un buen momento para valorar las bondades de Black en el cine de acción de las últimas décadas. Es considerado como el máximo artífice en poner de moda las buddy movies policíacas, películas en las que además de acción a raudales, encontrábamos una pareja bien diferenciada pero complementaria de protagonistas y humor, mucho humor, gris oscuro casi negro podríamos decir.
‘Arma Letal’ (‘Lethal Weapon’, 1987) ‘El Último Boy Scout’ (‘The Last Boy Scout’, 1991), ‘El Último Gran Héroe’ (‘Last Action Hero’, 1993), ‘Iron Man 3’ (Id., 2013), y ‘Dos Buenos Tipos’; todas escritas, o coescritas, por él y las dos últimas también dirigidas.
Pero en este artículo abordaremos otro de los aspectos capitales de los libretos de Black, no siempre tan señalado pero en ocasiones vitales en la obra. Estamos hablando de los niños.

Obviamente no todos los muchachos ocupan el mismo puesto ni tienen la misma importancia, así que nos centraremos en los más relevantes. Los que yo llamaría “los pequeños detectives”.

Teniendo en cuenta la predominancia de thillers de acción en su curriculum, uno de sus primeros guiones el de ‘Una Pandilla Alucinante’ (‘The Monster Squad’, 1987) aparece como una rareza. ¿Una historia sobre un grupo de niños que han de hacer frente a un equipo de monstruos? Pues sí, una suerte de Goonies que se ven las caras con Drácula, el monstruo de Frankenstein o un hombre lobo entre otros.
Para empezar, los pequeños son los protagonistas, son independientes, muestran un ingenio en los diálogos que ya quisieran muchos aspirantes a nuevo Woody Allen y pasan el tiempo como lo que ahora denominamos unos frikis; debatiendo entre otros temas si el hombre lobo posee o no testículos y si el uso de pantalones es para ocultar los mismos. Humor a raudales, ingenuidad, complicidad con la inocencia de los niños y mucha aventura. Eran los primeros pasos profesionales del guionista, pero las que serían sus constantes ya se podían apreciar bastante definidas.

Ahora nos ocuparemos de una de mis películas preferidas, la denostada y fracasada ‘El Último Gran Héroe’. La película de acción, comedia y metacine protagonizada por Arnold Schwarzenegger y dirigida nada más y nada menos por el realizador de ‘Depredador’ (‘Predator’, 1987) y ‘La Jungla de Cristal’ (‘Die Hard’, 1988), John McTiernan. Acompañando al actor austríaco, en el papel del héroe de acción Jack Slater, está Austin O’Brien haciendo de Danny Madigan, un preadolescente con el que no era difícil para muchos de nosotros identificarnos.
Danny Madigan es otro joven hastiado por su entorno, en una ciudad decadente, tomada por los pequeños delincuentes, hijo de una madre soltera, estudiante sin interés. Pero tiene una vía de escape de esa realidad… El Cine, el de acción para ser más exactos. Su actor favorito es Schwarzenegger y su personaje predilecto es el policía Jack Slater, protagonista de su propia saga de películas. Dejando claro que este no es sino la re-escritura de un guion ajeno por parte de Shane Black, en Madigan encontramos el paradigma del “pequeño detective”. Una vez que mediante una entrada mágica perteneciente en el pasado al mismísimo Houdini (me es imposible no recordar la trama y emocionarme) Danny viaja al interior de la cinta Jack Slater IV. El viaje inverso al de la premisa de ‘La Rosa Púrpura del Cairo’ (‘The Purple Rose of Cairo’, 1985). Allí, como él mismo certifica, se convierte en miembro de una peli de colegas y ayudará a Slater en el desarrollo del argumento. El sueño de todo joven amante del cine de acción ochentero, para qué nos vamos a engañar. Danny es autoconsciente de lo que le ocurre como personaje, es atrevido y pese al constante peligro disfruta del placer de ser parte activa de la lucha contra “los malos”.

En Iron Man 3, la reaparición de Black a la primera línea de la industria más de una década después de ‘Kiss Kiss Bang Bang’ (Id., 2005), volviendo a reescribir un libreto para entregar una atípica película para la factoría Marvel-Disney, siendo además la segunda vez que se ponía tras las cámaras. Una de las obras del Universo Cinematográfico de Marvel más controvertida. Pero aquí no estamos para juzgar giros de guion o fidelidad a los cómics.
Ty Simpkins, el niño de la cinta, no tiene tanto en tiempo en pantalla como los otros que hemos rescatado para la ocasión, pero sí muestra una química que podría asemejar a la de las buddy movies con el Tony Stark de Robert Downey Jr. En un momento de la historia en la que Stark se encuentra vencido y sin recursos, se ve obligado a formar alianza puntual con el pequeño Harley Keener. Harley es otro buen ejemplo de niño si no detective, si cooperador más que útil del protagonista adulto. Es además otro friki, de la tecnología en este caso, otro inadaptado (como lo fueron los amantes de lo paranormal de ‘Una Pandilla Alucinante’) y para colmo sufre abusos de un compañero del colegio. No es de extrañar que Simpkins luego fuera escogido para Jurassic World, porque es sin duda el niño más “Spielberg” dentro de la filmografía de Shane. Lo que puede hacer que algunos lo encuentren algo repelente.

Y llegamos al último infante que rescato para este repaso, en este caso una muchacha. Angourine Rice se mete en la piel de Holly March, la perspicaz vástago de Holland March, Ryan Gosling en ‘Dos Buenos Tipos’. Holly se introduce poco a poco y cada vez con más relevancia en el binomio que forma su padre con Jackson Healy, Russel Crowe. Desapariciones, asesinatos, drogas, pornografía, corrupción y un largo etcétera es a lo que los detectives se ocuparán en esta película de acción y comedia (cómo no) ambientada en los psicodélicos setenta.
Aquí Shane Black pisa el acelerador y la buena de Holly es su creación infantil más aventajada, más inteligente, más apañada, más atrevida. Se mete en líos como no puede ser de otra forma, pero su inteligencia y capacidad de improvisación la distinguen. La promoción no quiso dar una imagen que pudiera confundir el proyecto con una película familiar, pero bien se merecía la pequeña más espacio en posters y trailers.

De momento, el cineasta de Pittsburgh tiene anunciada una película de ‘The Predator’ (‘The Predaror’, 2018) y una adaptación del cómic ‘Doc Savage’. No sabemos a día de hoy qué será de esos proyectos o de otros pero sí sabemos lo que podemos esperar de un Shane Black que nunca abandona sus raíces y el sello que le ha llevado a donde está hoy: balas, explosiones, secuestros, policías en decadencia, divertidos choques dialécticos, persecuciones, cigarrillos, alcohol y por supuesto pequeños detectives.

Hola. Dejo un artículo que escribí hace unos meses con el motivo del estreno de 'The Nice Guys', la última película de Shane Black. Hablo sobre los personajes de niños o adolescentes que aparecen en su cine, ya sea en sus guiones o en los films que también se ha encargado de dirigir. Espero que os reulte interesante.