Ben Shockley

Infinitas gracias a todos, me complace que a raíz de mis aportaciones la gente se anime a descubrir películas que no ha visto todavía o que si ya lo ha hecho, recobre la ilusión por volver a verlas.

Al hacer un repaso de los tags de #CineClubMubis vi que no había ninguno dedicado a un director japonés y me pareció que iniciar la andadura del cine oriental con la obra maestra de Yasujirō Ozu sería un buen comienzo.

Me alegra ver que poco a poco, estamos haciendo de ésta sección un punto de encuentro de cinéfilos que conformamos ya "una pequeña familia" si me permitís la expresión por su idoneidad con la película tratada.

Os animo a todos para continuar con ésta excelente iniciativa que tuvo nuestro compañero Espagueti con tu Sangre hace ahora tres años y que tan buenos momentos nos está reportando.

Una más que no conocía y que me ha entrado muchas ganas de ver :-). Gran aporte Ben Shockley.

Gracias Ben por otro aporte MAYÚSCULO!!!!
Película brutal en todos los sentidos. Una autentica maravilla que habría que ver si o si cada año para valorarla como lo que es: una de las mejores películas de todos los tiempos.
Vi esta película por primera vez cuando era demasiado joven para poder valorarla, y ya me pareció una excelente película. Cuando años más tarde pude volver a disfrutarla, me dí cuenta de muchas mas cosas y capté prÁcticamente toda la esencia de esta obra.
gRACIAS a ella empecé a interesarme en el cine asiático.
Joder que pedazo de CineClubMubis!!!

Perdona Ben Shockley. Me había pasado por alto este aporte, pensé que después de esa magnífica intervención de MacNamara con "Deseando amar" no se le podía pedir más a mubis en esta jornada.
Y mira tú por donde, unas horas más tarde vuelvo a entrar, y me encuentro con otro CineClubMubis que contiene un preciso y detallado análisis de una de las películas que he tenido el placer de ver, que más admiro y valoro.
Cine en este caso bastante contrapuesto al otro, de fácil ingesta pero de profundos sentimientos, fiel retrato del comportamiento humano frente a situaciones de lo más cotidianas, con una mezcla de amargor con una belleza inigualable.
Y prueba de su temática atemporal es el homenaje que en 2013 realizó Yoji Yamada en esa espléndida película llamada "Una familia de Tokio" que desde aquí os quiero recomendar.
Te felicito Ben, a la vez que te doy las gracias por este interesantísimo aporte.

Yo también compré la edición de A Contracorriente animado por esos comentarios de La mejor película de todos los tiempos. Es cierto que al principio me pareció muy lenta, mucho, pero pasada la primera hora estaba enganchado pese a la sencillez de la historia y el desarrollo, y el tramo final es abrumador. Cómo me dejó la peli, eso no te pasa muchas veces. Y la imagen de la edición fantástica.
Un placer leer sobre este peliculón Ben Shockley :)

Muchas gracias a todos por pasar por el post y dejar vuestros comentarios.

Peliculón, me la pillé a ciegas gracias a la gran edición de A contracorriente y acerté de lleno. Como dice McNamara, un tema tan actual y llevado al cine con tanto acierto.

Es el mismo tema que la española Abuelo Made in Spain de Paco Martinez Soria y mientras una quedó desactualizada a los 5 años la otra se ha convertido en un clásico del cine mundial. Muy recomendable.

Yo tengo que volver a verla, siempre salía en todas las listas de mejores películas y la compré a ciegas, no me defraudó pero era bastante más joven y no la entendí bien. Creo que esta obra merece ser vista cada cierto tiempo y sacarle todo el jugo. Obra maestra. Genial Cineclubmubis Ben, gracias.

Tengo una cuenta pendiente con el cine de Ozu, pues admito que todavía no me he visto nada de él aunque su nombre no me es desconocido ni tampoco la película de la que se habla en este post.

Ben Shockley, en pocos días estás haciendo incrementar mi listado de películas pendientes, pero no te cortes, sigue así porque te lo agradezco.

Una obra maestra y una película muy hermosa. Imprescindible.

Me está picando la curiosidad, no es un cine que esté habituado a ver pero tampoco me cierro a él. Y por lo que contáis la historia parece muy interesante y personal con varios puntos de vista.

Solamente para aclarar una cuestión y tener una idea, ¿esta película podría ser, en su manera de enseñar la vida de los personajes, un estilo a la de "Roma"?, por ejemplo.

Buen post, Ben Shockley.

Una auténtica obra maestra del cine japonés, con un estilo mucho menos recargado que el del maestro Kurosawa, pero no por ello menos acertado. Al fin y al cabo, cuenta una historia tan a priori simple, pero profunda, como la descomposición de una familia ante la despreocupación de los hijos por sus ancianos padres.

A la inmersión completa en este drama también contribuía el hecho de que gran parte de los diálogos entre personajes estaban filmados de manera que el personaje mirara a cámara, como si estuviese hablando con nosotros.

Hacer un análisis de esta obra sin duda llevaría varios días, pero no por ello debe no tenerse en cuenta este excelente filme.

Esto sí es una OBRA MAESTRA, con mayúsculas. Una película de 10 rotundo en todos sus aspectos. La edición de a contracorriente es de lo mejor que han hecho, una pena que no sigan editando más cine de Ozu. Gracias por el hilo Ben.

Uuuuuf!!! maravillosa cinta donde las haya, con una problemática que casi 70 años después no solo continua más vigente si cabe, sino multiplicada por el continuo provecho, no solo económico, que muchos hijos adultos hacen actualmente de sus padres ancianos. Un drama en toda regla.
Ozu era único contando historias de una manera simple y llana, pero desgarradora al tiempo. Gracias por este excelente post @Ben Shcockley

CUENTOS DE TOKYO (TOKYO MONOGATARI Yasujirō Ozu1953)
-------------------------------------------------------------------------

La historia fue escrita por el propio Ozu y uno de sus colaboradores habituales, Kôgo Noda, quien se inspiró en el film estadounidense “Dejad paso al mañana” (Make Way For Tomorrow de Leo McCarey 1937), uno de los films más duros jamás hechos por el tema a tratar, la vejez. Fue Noda quien sugirió la adaptación de la película, ya que Ozu aún no la había visto.

Después de un arduo trabajo de 103 días, el guion cinematográfico recogía la base de la futura película, pero en absoluto era un simple remake o interpretación oriental del citado film.

Cuentos de Tokio transcurre en una narración muy pausada, con multitud de planos poéticos únicamente contrastados por el propio sonido ambiente o la exquisita banda sonora compuesta por Takanobu Saito, vertida a cuentagotas sólo en determinados y muy sentidos instantes. Lejos de hacer que sus más de dos horas de metraje se tornen interminables, el viaje que Yasujirō Ozu nos propone se convierte en un puro deleite audiovisual que nos cautiva y envuelve en un halo de tristeza y nostalgia, sí, pero a la vez en un viaje de sentimientos, emociones y sensaciones que atrapan.

Refleja una espléndida pero a la vez desgarradora visión sobre la desintegración de la familia más allá del plano puramente físico. El último viaje de los ancianos Shukichi y Tomi Hirayama que se preparan para ir desde Onomichi hacia Osaka y Tokio, con la intención de visitar a sus hijos a los que llevan muchos años sin ver.

A través de pequeños detalles cotidianos, las comidas, la habitación, los paseos y regalos, los personajes secundarios con sus miradas y conversaciones, se desvela un semblante falso y cruel, muy cruel, donde la pareja de venerables padres descubre con asombro y perplejidad quiénes son verdaderamente sus hijos y no por ello derramarán una sola frase contra ellos.

Los hijos, absorbidos por su rutina diaria, no tienen tiempo para ocuparse de sus padres, por lo que, tras alguna jornada con cada uno de ellos, deciden enviarles a un balneario, convenciéndoles de que allí estarán mejor atendidos y cuidados. Pero lo que supone una buena idea para los hijos, no es la situación ideal para los padres, confinados en un lugar “para jóvenes” en el que apenas pueden descansar debido al bullicio de los otros clientes, por lo que el matrimonio deciden regresar antes de tiempo a Tokio y, conscientes de la molestia que representan para sus hijos, regresar desde allí a Onomichi, su lugar de residencia.

Ya de vuelta en su hogar, a los pocos días los hijos reciben la noticia de que la matriarca Tomi ha caído gravemente enferma y le queda poco tiempo de vida.

El postrer viaje marca a través de la muerte la pérdida de la familia, lo que nos conduce a ese decorado triste y vacío del hogar de los ancianos, en donde Shukichi se resignará en la aceptación de su soledad con a la única compañía de su hija más joven, Kyôko. Tras el funeral, los hijos regresan rápidamente a Tokio mientras que su nuera Noriko se queda todavía un dia más. Habiendo tenido cinco hijos, habrá sido únicamente su hija política la que se mantenga cerca de ellos. Su personaje viene a ser, quizá, la única esperanza propuesta por Ozu de que esa forma de vida paterna, con gran arraigo y respeto por lo propio, tenga siempre un mañana.

Ozu contrató a muchos de los actores y miembros del equipo que habían trabajado durante años con él. En 1953 Cuentos de Tokio es estrenada en Japón, sin demasiado reconocimiento y considerada "demasiado japonesa" para ser comercializada. Cuatro años más tarde, en 1957, se proyectó en Londres y un año después, ganó la primera edición de Sutherland Trophy, recibiendo elogios de los críticos de cine de Estados Unidos, después de que se proyectara en la ciudad de Nueva York en 1972.

El crítico de cine Roger Ebert señaló que la cámara solo se mueve una vez en toda la película, más de lo normal en el cine de Ozu, amante del encuadre fijo. La posición deliberadamente baja de la cámara evoca la forma tradicional de sentarse de los japoneses en los tatami.

Internacionalmente elogiada como una de las películas más importantes de la historia, en el resultado del prestigioso ranking de la revista Sight and Sound, realizado por el British Film Institute en 2012, CUENTOS DE TOKIO fue elegida como la mejor película de todos los tiempos según la votación de los directores internacionales más influyentes, y la tercera en la elección de los críticos.

“A veces la gente convierte las cosas sencillas en algo muy complicado. La esencia de la vida, que parece compleja, puede ser simple de manera totalmente inatendida. (...) Quiero dar a la gente el sentimiento de la vida sin acudir a los altibajos dramáticos” Yasujiro Ozu

PD

A Contracorriente Films editó el 18 de junio de 2013 en blu-ray CUENTOS DE TOKIO en nuestro país. La película se presenta en la versión restaurada por su productora Shochiku a partir del negativo original, estrenada mundialmente en el Festival de Berlín de 2013 y la edición incluye entre otros extras un fabuloso documental de Wim Wenders de 1985 sobre Yasujiro Ozu.

https://www.youtube.com/watch?v=cAX24DRaZIc