Alfonso LG

Gracias por pasaros y comentar en este post tan… familiar. Lamento no haber podido contestaros antes y seguir con esta macabra ida de olla.
Un abrazo, caballeros

Yo tengo claro que el culpable de meter en la caja metálica a Alfons LGés (Que nunca Descanse en Paz) tuvo que ser el Cableado Joe ése (Sí, eso, Dark Cabroncio, bien hecho. Dirije las miradas acusatorias hacia ese pesao de la tv por Cable y que no descubran nunca la verdad, jijiji)
Para nuestra desgrac... quiero decir, para nuestro gran regojizo, su alter-ego venido de una dimensión paralelos ya está entre nosotros, como bien demuestra tu nueva foto de usuario. Espero que seas un buen sustituto, tan simpático y majara como el joputa ése que murió ardiendo y sufriendo por la gloria de Satán.... Esto, de Cableado Joe, jejeje, ya no sé ni lo que digo, la noche me confunde a pesar de ser de día XD
El siguiente desafío que les espera a los desafortunados supervivientes promete: Alegales
¿Qué destino les aguardará en este juego macabro? ¡No os perdáis el próximo programa de El Juego del Pulpo de Mar! :D

Por cierto, fantástica foto con la calavera del difunto Alfons LGés. Me alegra comprobar que te surtistes de buen material de Ediciones 79... pero Bermuda Tentacles? En serio? Seguro que es parte de alguna confusión, encargarías Bad Taste y por Mal Gusto entendieron que te referías a esa película. Luego la devolverías diciendo que haber si te la podían cambiar por la de Ataque a los Titanes, y para allá que te mandaron de vuelta a Kolossus vs MegaShark. Ya no tiene remedio, te la tendrás que quedar :D Muy buenas compras, que no se te atraganten y las disfrutes, campeón :) Saludos satánicos.

En cuanto has llegado al regatón he dejado de leer, ahí ya seguro mueren todos con esa música.
Y si, como dice el amigo jackburtonalrescate, cambia la medicación.
De las pelis no he visto/tengo/veré ninguna, no es mi cine.

Amigo Alfonso, tienes que cambiar la medicación. Creo que es hora de que El juego del coleccionista Parte III se tiña de bonitas películas. Un poco de Sonrisas y lágrimas, mi amiga Mary Poppins e incluso Hannah Montana en sus comienzos no te harán daño.
Aunque eso sí, mañana te quiero ver en el cine viendo a Michael Myers, así que cambia la medicación el sábado.
Yo por lo pronto ya tengo preparadas para este finde La casa de los mil cadáveres y Los renegados del diablo que hace mucho que no las veo y así, repasadas veo la pendiente 3 from hell.
Y para pesado mi Jefe...y no habla de pelis

Jajaja vaya forma más horrible de morir. Que te explote la cabeza por aguantar a un pesado, digo XD
En la de alegales sí que va a haber sangre XD

Muy buena esta segunda parte de los Games :-).

Ese placer es por Silke ¿verdad? :D
Pobre LGés… ¿merecía acabar así? SIN DUDA ^^

La zona de arriba a la derecha de la foto me produce placer visual.

Tremendo plot twist, ha muerto Alfons LGés. Ahora mi duda es quién es el narrador de esta macabra historia :O
Y se viene fuerte en la siguiente prueba con las alegales, jajaja.

Tras la estruendosa aparición de la lluvia de balas el silencio se hizo en la sala. El mar de sangre formaba pequeños islotes con las mesas, dando a probar su cálido y metálico sabor a los que aún permanecían en pie. Me descubrí cubierto de pedazos de cráneo y masa encefálica. Miraba mis manos teñidas de rojo carmesí pero no reaccionaba. La pantalla mostraba diez ganadores pero en pie permanecían trece. Terrible fue la puntería que acabó con la mayoría pero tres seguían con vida. Entonces comenzaron los gritos. La macabra danza de cuerpos resbalando por la sangre, tratando de huir de una muerte tardía, generó la aparición de los instintos más primarios del ser humano.
Todos tratamos de salir de allí abriéndonos paso entre cadáveres que anunciaban nuestro futuro inmediato. Tropecé. Caí sobre los restos de un compañero con el que había discutido en la mayoría de los posts que subía. Pobre Capitán Burbujas. Tan activo antaño y ahora tan en cachitos…
Algo parecido le pasó a otro compañero que, como yo, había superado la prueba pero había ido a caer de boca encima de un muerto. Nunca olvidaré su cara cubierta de vísceras, sangre y donuts. Y lo peor fue cuando casi vomita por culpa de un pelo que se le metió en la boca: “¡Dios, un puto pelo, qué asco!” dijo el pobrecito.

“Atención, cucos y lindos participantes. La fase de eliminación no ha concluido. Los ganadores podrán salir pero antes la sala debe quedar purificada de perdedores. Aléjense de ellos. No traten de ayudarles, no se compadezcan, no mantengan contacto. Repito. Debemos erradicar el fracaso, no se interpongan bajo ningún concepto o también serán eliminados”

Aquello nos dejó las cosas bien claras y no necesitamos una segunda advertencia para obedecer. Nos alejamos todo lo que pudimos de los tres sentenciados esperando lo inevitable.
Suplicaban por su vida como lo haría cualquiera. Mi corazón se desgarró de impotencia, horror y pena.
Sin dar más tiempo a la incertidumbre, un acceso, hasta entonces inadvertido por nosotros, se abrió y salieron seis personas embutidas en trajes de cuero rojo, máscaras de Luis Miguel cuando estaba super gordo y armados con rifles de asalto. Por parejas fueron a por los tres sentenciados.
Una vez los maniataron nos preparamos para su ejecución. Pero esta no llegó. Pensé que abrirían fuego contra ellos pero no fue así.
Entonces otros dos soldados entraron en escena trayendo consigo una gran caja rectangular de hierro forjado. Cogieron a uno de los sentenciados y lo metieron dentro. Pude ver de quién se trataba. Era Alfons LGés. Cuando cerraron la caja me di cuenta que se trataba de un steelbook gigantesco, sin ningún tipo de diseño pero con algo escrito con spray en su portada: “Puta variedad metálica”
Echaron gasolina sobre la caja y le prendieron fuego. Pudimos oír al desgraciado asarse vivo dentro entre gritos de agonía insoportable.
El Toro de Falaris 2.0
Luego fue el turno de los otros dos. Trajeron dos sillas al centro de la sala y los sentaron atados de pies y manos para que no pudieran escapar. Al resto nos dieron unos AirPods para que nos los pusiéramos y escucháramos música… a mí me pusieron reggaeton con sus papis, mamis, yatusabes, pam pam dale dale, no sé qué de una puta gasolina y casi que me entraron ganas de quitármelos y abrazar una muerte segura… pero la idea se esfumó al ver quién entraba en la sala: Cableado Joe.
Se colocó junto a ellos y comenzó a parlotear sobre lo mismo una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez… Fui testigo de cómo sus cabezas explotaban como globos. Y aún así no se callaba. Seguía y seguía y no paraba y dale que dale y que si esto que si lo otro, que si Arrebato, Blade Runner y la pascuala.
Entre todos los guardias se lo tuvieron que llevar baneado de la sala, usando todas sus fuerzas porque a cada segundo que pasaba se hacía más y más pesado. Unos minutos mas y hubieran tenido que usar una grúa.

“Queridos participantes, pueden salir de la sala y volver a sus camastros. Podrán darse una ducha para limpiar el hedor de la sangre y prepararse para el próximo desafío que de seguro deleitará vuestro paladar cinéfilo. Os damos una pista para aliviar este primer disgusto: Alegales.
Nos vemos, pechiochos”